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La Maestra Suprema Ching Hai (vegana) como famosa maestra espiritual y artista, nos edifica no solo a través de la guía espiritual, sino también a través de extraordinarias obras artísticas. Hoy recorreremos la Galería de Arte Celestial creada por la Maestra Suprema Ching Hai. Las obras de arte de la Maestra presentan por completo la belleza del cielo.Master: Cualquier tipo de arte, como la pintura y cualquier otra obra de arte, tiene como objetivo recordar a las personas que intenten penetrar en su interior, encontrar su propia Naturaleza Búdica o Reino de Dios.Por lo general, un pintor profesional puede pintar con un solo estilo. Sin embargo, la obra de arte de un Maestro plenamente iluminado puede presentar la belleza de la pintura a través de todo tipo de estilos. La forma en que ese Maestro crea pinturas y otras obras de arte explica plenamente lo que significa “Hacer sin hacer”.Es cierto que para las para las personas que tienen sabiduría, que meditan, que se vuelven como niños y lo confían todo a Dios; las cosas suceden tal y como sopla el viento, tal y como sale y se pone el sol. Realmente no hay necesidad de esfuerzo. Pienso en todos los pintores, por ejemplo, los profesionales, que tardan días o semanas en pintar un cuadro, sin embargo yo lo hago en unas pocas horas, a veces en media hora, dependiendo de la situación. Y nunca he aprendido ninguna técnica. Ni siquiera he leído libros sobre pintura, y a otras personas les gustan, es decir, a personas ajenas, no solo a nosotros. Ni siquiera hice mucho esfuerzo.Las grandes pinturas son un un tesoro preciado en el mundo. Cada pincelada captura la la historia, la cultura, la expresión, e incluso las bendiciones, enriqueciendo las experiencias de las almas del pasado, del presente y del futuro sin experimentarlos físicamente. Las pinturas de la Maestra Suprema Ching Hai (vegana) son únicas. Nos abren las puertas para entrar en un tiempo y espacio, o en un rincón del cielo que fue experimentado, capturado o creado por la Maestra. Estas increíbles obras de arte enriquecen nuestra comprensión de diversos aspectos del mundo y más allá de este mundo, y nutren nuestras almas con abundantes bendiciones.Q: Hay una pintura de la Maestra llamada “Yin y Yang”. Mientras la admiraba, apareció en mi mente una vívida imagen de las fuerzas del bien y del mal entrando en guerra. A veces ganaba la fuerza positiva; otras veces, la fuerza maligna. El ciclo continuaba sin cesar y nunca terminaba. Recé para que la Maestra me iluminara al respecto. La Compasiva Maestra me mostró una visión y un tipo de poder llamado “Victoria positiva”.Esta obra representa a dos hombres que interpretan los papeles paradójicos de las fuerzas del yin y del yan en la naturaleza humana, atrapados en el mundo de la ilusión. Así, se enzarzan en un duelo fatal entre lo entre lo positivo y lo negativo, lo real y lo falso. Tan absortos están en el combate que no se dan cuenta de la necesidad de reconciliar sus diferencias y cooperar entre sí para escapar del mundo mundano simbolizado por el fuego que arde lentamente a su alrededor. Las figuras son ajenas a la mujer fría y distante (un instrumento del Rey de Maya), que se burla con desdén: “Estás bajo mi control. Tengo todo el tiempo del mundo para jugar contigo. No hay prisa. Tómate tu tiempo para asarte lentamente en el fuego. ¡Tómate tu tiempo para disfrutar de este sufrimiento!”. La pintura nos recuerda que no debemos dejarnos engañar por el mundo ilusorio que parece tan real.Las personas mundanas son son obstinadas como “La Convención de Piedra”, debatiendo constantemente y participando en “Discusiones”, pero no pueden lograr la paz mundial. Sin embargo, incluso la piedra tiene una “Cueva de Piedra”, como el ojo de la sabiduría en nuestro interior: una vez abierto, se llena de una luz supra-mundana. Con un profundo “anhelo” por la iluminación, buscamos establecer una conexión con un Maestro iluminado.Esta es una historia espiritual contada a través de las primeras obras de arte de la Maestra Suprema Ching Hai (vegana), creadas cuando la Maestra vivía en Pingtung en 1990. Con estas pinturas, que fueron realizadas en el mismo periodo entre noviembre y diciembre de 1990, la Maestra La Maestra Suprema Ching Hai reveló los principales problemas del mundo en aquel momento: la Guerra del Golfo, que involucró a múltiples naciones de Oriente Medio. A través de estas pinturas, la Maestra Suprema Ching Hai presentó Sus preocupaciones y Su misión vital de ayudar al mundo a través de la iluminación de las almas.El tema de la pintura se refiere a aquellas personas personas engreídas que poseen la sensibilidad de las piedras y tienen una inclinación por las interminables reuniones, pero nunca resuelven ningún problema; las guerras y los desastres provocados por el hombre continúan como de costumbre. La arena amarilla y roja que las rodea representa a las personas débiles e indefensas y sus sentimientos de ansiedad y furia. Por el contrario, los tonos negros y azules de las piedras simbolizan el poder, el intelecto frío y el juego interminable de la mente y sus argumentos. Los contrastantes tonos cálidos y fríos crean una gran tensión entre los dos bandos opuestos.Al utilizar las grandes rocas de la naturaleza, la Maestra Suprema Ching Hai expresó Su preocupación por la situación mundial, y a través de esta pintura, podría funcionar como una ventana abierta para despertar la conciencia pública e inspirar a figuras importantes a hacer la paz y preocuparse por las personas indefensas.En diciembre de 1990, la Maestra Suprema Ching Hai pintó “Discusión”. Esta pintura nos mostró algunos acontecimientos históricos específicos en el fondo y la esperanza de la Maestra Suprema Ching Hai (vegana) de dar una solución clave. Desde la gente común hasta las figuras importantes del mundo, todos se acostumbran a discutir basándose en sus conocimientos e inteligencia en lugar de utilizar la sabiduría y su experiencia personal sobre el tema que van a resolver. La imagen central del cuadro es la de dos libros colocados uno frente al otro sobre una mesa, discutiendo entre sí sobre la parte roja del cuadro, ¿o es su pelea la que tiñe de rojo el lugar donde se encuentran?Esta pintura nos reveló secretamente que la Maestra Suprema Ching Hai no solo es una Maestra espiritual, sino también una tutora para que todos resuelvan problemas clave.La mayoría de las personas discuten utilizando conocimientos académicos porque carecen de experiencia personal sobre el tema que están debatiendo. La imagen central de la pintura es la de dos libros sobre una mesa discutiendo entre sí. La mesa inclinada de la obra simboliza los pensamientos negativos y los conceptos distorsionados de los seres humanos, y sus colores oscuros y turbios representan su inclinación hacia la guerra, la lucha y la argumentación. Ambos libros se titulan “N.º 1” y ambos reivindican su supremacía mientras se enzarzan en un acalorado debate. Por lo tanto, la pintura es una parábola sobre las debilidades humanas.La pintura dice más que muchas palabras y se centra directamente en el problema clave de las guerras en ese contexto histórico. A veces, la solución más simple puede resolver el problema más complejo. “Utilizar la sabiduría y el amor para resolver los problemas en lugar de alardear de conocimientos para defender No. 1,” es la sabiduría que esta pintura intenta expresar y mostrarnos la mejor solución para alcanzar la paz mundial.
